#FuerzaOneChot

Juan David Chacón Benítez perteneció a los grupos Negus Nagast y Papashanty Saundsystem . La foto fue tomada por David Maris
Un disparo interrumpe el juego de metras de dos niños en uno de los barrios de Caracas. La sangre baja las escalinatas, llega al asfalto, se transporta por las aceras e invade toda la ciudad como una marea, una marea roja de odio, violencia y crueldad. Así comienza el video de Rotten Town, quizás la canción más conocida del licenciado Juan David Chacón Benítez, del pana Juancho, del músico OneChot.

El artista de 34 años de edad está en la clínica Santa Sofía después de sobrevivir a un plomazo disparado por alguno de los miles de criminales que destruyen vidas con impunidad y sin control.

 “Déjenme presentarles a Caracas
embajada del infierno.
Tierra de asesinos y pistoleros.
Cientos de personas mueren todas las semanas,
no vivimos en guerra, pero el país está lleno de locos.
Aquí hay más muertes que en Pakistán
Líbano, Kosovo, Vietnam y Afganistán”.
El video de Rotten Town, dirigido por el cineasta Hernán Jabes, fue presentado al público en agosto de 2010, días antes de que uno de los integrantes del equipo técnico fuera víctima de un secuestro express. Tanto molestaron las imágenes y las letras de esta obra que una de las panfletistas de VTV anunció que se investigaría por “amarillista”. Dos años después el cantante es víctima de la delincuencia y la panfletista goza de las prebendas de ser diputada.

OneChot es uno de los fundadores de Negus Nagast, grupo de reggae que comenzó a sonar desde 1999 en la UCV y que ha grabado dos discos: Rastafari Fi Salvation (2002) e I And I Pro Jah (2007). También formó parte del colectivo Papashanty Saundsystem, que popularizó el tema Música de paz del disco Ashanty Granpa (2005).

“Música de paz, música de amor,
música enfocada en proyectar buena intención,
música de esencia
para estimular el valor de la conciencia
criticando la maldad y el ego
rechazando siempre al falso apego”.
En 2005, Oscar Todtmann Editores publicó su tesis de grado para obtener el título de Comunicación Social de la UCV, escrita junto a César Cortez: Reggae y Rastafari. Dos formas de entender el Caribe

OneChot lanza en 2008 el disco 1st Shot, trabajo al que invita a los músicos jamaiquinos Michael Rose, Sly Dunbar y Fire Tea; al rapero argentino Fidel Nadal, al chileno Boomer y a los locales Bosta´s Brain y Rekeson. En este disco, el poeta venezolano Alfredo Chacón, padre de OneChot, recita:


“Situada a igual distancia de cada uno de nosotros,
la ciudad de que hablo arde de una luz distinta.
Es la hora en que la vida estalla
y somos capaces de llegar al colmo
y resistir, lo mismo que una llama”.
En 2010, OneChot editó Ruff, en el disco repite como colaborador el jamaiquino Fire Tea y se suman los colombianos Binghi Fyah, Ras Jahonnan, el grupo ChocQuib Town; el cubano Sekou; el británico 2Irie y los venezolanos Blanquito Man, Bless Killa, Sr. Méndez, Valentino Thompson, McKlopedia y el gran percusionista Nené Quintero.


Para el presente año, el artista tiene proyectado el disco Natural, el tema promocional de este trabajo es No voy a pensar en ti.

“Hoy es otro día para volver a empezar.
Hoy quiero reír,
salir a trotar.
Ir a la montaña, aire puro respirar.
Hoy quiero vivir,
hoy quiero cantar”.
Recupérate pronto Juancho para que sigas cantando. Seguro el León de Judah te ayuda a salir bien de todo esto. #FuerzaOneChot.

Comentarios

  1. La fuerza está en ti nuestro Juanchoo

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  2. Comparto con ustedes un poema de Alfredo Chacón, dedicado a su hijo Juan David, está en el libro Y todo lo demás, de la primera edición de Monte Ávila Editores en 2004.

    Historia natural del sonido

    Para mi hijo Juan David

    recién llegar desde el murmullo que lejos acontece su vorágine

    que aquí mismo es rumor
    precipitado
    el paso de los latidos
    pasan cada uno al lado por las partes del cuerpo
    en lo más cercano del furor sanguíneo
    y la circulación del tiempo afuera
    y hacia adentro por los mismos canales del pulso
    recordado en las fibras del impulso medido
    el movimiento
    repetido por la ebullición sentida en el silencio y la energía
    remota el principio recién abandonado por los ritmos del rumor que envuelve.

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